lunes, 25 de febrero de 2008

De la necesidad de privacidad y de cigarrillos...

Privacidad, dícese del ámbito de la vida privada que se tiene derecho a proteger de cualquier intromisión, según la RAE.

¿Será posible que algún día logren entender eso? Ni si quiera sé por qué formulo la pregunta, todo parece indicar que nunca lo entenderán. Las personas creen que por tener lazos 'sanguíneos' pues una está obligada a rendirles cuentas de todo lo que hace, de las amistades, costumbres, vicios, gastos y hombres que una tiene en su vida.
No me gusta nada eso. Asumo ser una persona muy independiente, a pesar de que no se planchar, cocinar, ni limpiar, pero estoy segura de que puedo afrontar situaciones y emociones tal vez no de una buena forma pero a mi forma, a mi manera y eso basta lo demás es accesorio...
En fin, sólo me gustaría reclamar espacio propio, derecho a la privacidad y que mejor aún derecho a la soledad. Adoro estar sola y poder pensar y hacer cosas sola, repito SOLA, sin embargo en casa me restringen ese derecho, no sabes la lucha que tengo que dar todos los días, básicamente soy fugitiva en mi propia casa, huyendo de todos...
Algún día podré estar tranquila, sola, seguramente no feliz pero algo feliz por vivr como quiero con privacidad y mejor aún en soledad, en soledad y con cigarrillos... sobre la necesidad de cigarrilos creo que hablaré después

sábado, 23 de febrero de 2008

Querida señora, tenga usted a bien declararme perdedora

Perdedora de los estribos, perdedora de las loterías, perdedora de las rifas por navidad o por el día de la madre

Decláreme usted perdedora, perdedora de las separatas, de los cuadernos olvidados en las fotocopiadoras, de los cuadernos olvidados en los baños, de los múltiples objetos que alguna vez he dejado regados por todas las casas que suelo invadir, de todos esos objetos que han sido víctimas de mi olvido, decláreme perdedora.

Declareme perdedora, porque soy la mujer que se pierde las sonrisas de aquellas personas que le interesan, porque soy la mujer que se pierde los halagos, los cumplidos, porque soy la mujer que se pierde las noches con aquellas personas que alguna vez le han importado.

Decláreme perdedora, tenga usted a bien señora, señora fortuna, declararme perdedora.




Cupido con la Rueda de la Fortuna
Tiziano